Step by step

1. 1 Diluir la levadura seca instantánea en el agua.
2. 2 Añadir la leche, el aceite de oliva, el azúcar, la sal y el huevo y mezclar todo bien.
3. 3 Agregar la mezcla anterior a la harina y amasar hasta conseguir una masa homogénea, elástica y un poco pegajosa.
4. 4 Untar la masa con un poquito de aceite de oliva, colocar en un bol y tapar con un trapo.
5. 5 Dejar fermentar durante dos horas o hasta que triplique su volumen.
6. 6 Enharinar el banco de la cocina, colocar la masa encima y amasar ligeramente.
7. 7 Dividir la masa en ocho porciones, dar forma de bola a cada porción y aplastar ligeramente con la mano.
8. 8 Colocar las porciones sobre una bandeja de horno, tapar con un trapo y dejar fermentar una hora o hasta que doblen su tamaño.
9. 9 Precalentar el horno a 220ºC con calor arriba y abajo y sin ventilador, pintar los panecillos con un poquito de agua y espolvorear con las semillas de sésamo.
10. 10 Bajar la temperatura a 200ºC, abrir el horno, echar un poco de agua con un pulverizador y hornear los panecillos durante 12-15 minutos.
11. 11 Sacar del horno y dejar enfriar sobre una rejilla.